La silicona antihongos es un producto que no requiere de especial manejo para aplicar. Sin embargo, para que tenga los acabados de un profesional en esta nota le traemos un par de tips. Infórmese aquí.
La silicona antihongos es un adhesivo sellante, o producto de fijación, excelente para sellar uniones de forma segura en materiales como madera, vidrio, cerámica, azulejos e inclusive algunos tipos de plástico. Es resistente a las vibraciones, cambios de temperatura y a la intemperie; lo que permite que las superficies en las que se aplica no se hundan ni se caigan.
Si bien la silicona industrial convencional cumple con muchas de las características anteriores, lo que hace especial al producto antihongos es que puede aplicarse en superficies donde existe riesgo constante de contacto con la humedad, tales como: cocinas, lavaplatos, duchas, lavaderos, baños o tinas, sin que el producto se llene de hongos o sufra daños.
Aunque la aplicación de la silicona antihongos no es un proceso complicado que requiera la atención inmediata de un especialista, para garantizar la efectividad del producto y sellar o pegar correctamente superficies existen una serie de pasos que se deben tomar en cuenta. A continuación, los compartimos.
1. Limpie y seque de forma adecuada la zona donde va a aplicar el producto, para asegurar que el adhesivo actúe en óptimas condiciones.
2. Corte el extremo del cartucho de forma uniforme y enrosque la boquilla aplicadora.
3. Corte la boquilla según el uso que vaya a darle. Este paso es fundamental, ya que según el ángulo o el modo del corte se pueden obtener efectos diferentes para adaptar el cordón del sellante. De este paso depende la graduación de la forma y el espesor con el que sale la silicona.
4. Coloque el cartucho en la pistola de calafateo.
5. Aplique de forma firme y continua la silicona sobre la superficie que se quiere pegar o sellar.
6. Para asegurar una aplicación uniforme, una las partes que desea pegar y alise inmediatamente con una espátula para emparejar y dar un acabado estético.
7. El tiempo de secado depende de la cantidad de silicona que se aplicó en la superficie. A mayor espesor, mayor tiempo de curado. Otro factor que influye en este proceso es la humedad y el ambiente al que está expuesto el producto. A mayor exposición a la intemperie, menor es el tiempo de curado.
8. En caso de querer asegurar acabados impecables, es necesario actuar antes de que se complete el proceso de curado del producto. Para ello, se puede utilizar un solvente como el alcohol e ir removiendo con cuidado los lugares donde el sellante se ve poco estético. Si por algún motivo el sellante no se remueve antes del proceso de secado, la silicona se tiene que cortar y raspar de forma manual.
9. Si bien la silicona no es tóxica después del proceso de curado, se recomienda lavar las manos con agua y jabón tan pronto se cierre el producto, para evitar irritación en piel y ojos.
Una vez terminado el proceso de sellado con la silicona antihongos, esta debe almacenarse en sus envases originales, correctamente tapados, en un lugar fresco y seco. Además, se recomienda que el espacio en el que se guarde esté cubierto y tenga buena ventilación, para evitar condiciones de calor excesivo que echen a perder el sellante.
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